Hoy en clase hablamos de las telenovelas y el país vanidoso que es Venezuela. Creo que era una sorpresa para todos descubrir que la cirugía plástica es algo tan normal como ir al ortodontista, pero así es la sociedad Venezolana, enfocada por lo mayoría en el exterior, y pagando más para los productos y los procesos de belleza que se paga para la educación. En Ciudad bendita, se explora el tema de tener un protagonista, Juan, que parece más o menos normal, y una mujer que es muy bella, pero tiene una cojera. Aunque el protagonista es muy agradable y parece ser un músico muy bueno, hay mucha gente, o muchas audiencias que no les interesan de él porque no es “el hombre ideal.” Desafortunadamente, las audiencias también quieren que Bendita sea más perfecta, y no disfrutan de ella completamente con todos sus problemas de caminar, mostrando que las audiencias no creen que se puede tener la felicidad con un defecto físico.
Las telenovelas tienen el poder de cambiar el perspectivo de sus audiencias. Pueden informar la gente sobre un problema social como el abuso sexual, pero también pueden transmitir un mensaje más profundo. La mejor calidad de las telenovelas es que los protagonistas siempre terminan siendo felices, y aunque por lo mayoría son bellos físicamente, también viven con una belleza interior. Esa es la belleza que apoya las telenovelas, y esa es la belleza en la que todos deben enfocar.
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