martes, 31 de agosto de 2010

Por que no se puede apartar la mirada

Es cliché. A veces muy cliché. “Ay mi amor, no te vayas, te amo tanto. Yo se que no he sido santo pero lo puedo arreglar, mi amor.” Y usualmente, no lo aceptamos, por lo menos a primeras, situaciones y expresiones de sentimientos demasiado usado. Tiene sentido. Cuando una contemplación sobre las complexidades de la vida están reducidas hasta frases fáciles y arquetipos básicos, nos damos cuenta que algo puro y con vivez ha sido perdido, que la vida no es así. Entonces, ¿porque miramos? ¿Por qué el mundo se encantan las telenovelas con tanto furor?

Algunos dirán que estas representan un reducción en la calidad de arte, algo simple y cómodo que, en vez de religión, es un nuevo opiáceo para la gente. Para ser justo, tengo que decir que eso puede ser. Tal vez la gente mire a telenovelas como el mejor arte posible, que viva por las historias falsas de la trama y pierda la apreciación para poesía y literatura y vidas que no conforman a las esteriotipas del celuloide. Pero, quizás no. Quizás la gente no perciba las telenovelas con esa perspectiva, tal vez la manía este basada en algo aparte de las ganas para lo fácil, lo cómodo, lo dramático. Espero verdaderamente que las telenovelas no nos conviertan en zombies inarticulados y melodramáticos.

Por lo tanto, ¿qué es que no nos motiva a seguir cada espectáculo? Arte, en su forma más alto nos causa a recordar contextos, eventos y perspectivas y reconsidera como nos afectan. Como he dicho, las telenovelas no hacen esto, o por lo menos no lo hacen como Cien Años de Soledad o Rayuela. ¿Entonces, que hacen, o si no hacen nada, que vale el placer de mirarlas? Idea: Las telenovelas, en parte, son religiones de verdad. Arquetipos prevalentes de conducta y comportamiento. Son simples pero también son las parábolas en la Biblia. No tratan a explicar todas de las complexidades en la existencia. Simplemente demuestran tipos básicos de las ideas sobre amor y morales y crimen y esperanza y desilusión. Ellos que pueden reconocer la falta puede desfrutar los shows. Pero el criticismo viene con respecto a ellos que no pueden ver el intento de la forma. Y los consecuencias puede ser casi tan grave como ellos que acompañan malas interpretaciones de la Biblia. Pues, por ahora, tengo que mirar Fuego en el Sangre y llorar como todos los hombres. ¡¿Por qué no puedo tener una mujer como Sofía?!

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